26a Semana Ordinario Santos Miguel, Gabriel, Rafael
Dn 7,9-10.13-14: Multitudes lo servían
Sal 138: «Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor»
Jn 1,47-51: «Verás a los ángeles en la presencia de Dios»
Viendo Jesús acercarse a Natanael, le dice: Ahí tienen un israelita de verdad, sin falsedad».
48 Le pregunta Natanael: ¿De qué me conoces? Jesús le contestó: Antes de que te llamara Felipe, te vi bajo la higuera.
49 Respondió Natanael: Maestro, tú eres el Hijo de Dios, el rey de Israel.
50 Jesús le contestó: ¿Crees porque te dije que te vi bajo la higuera? Cosas más grandes que éstas verás.
51 Y añadió: Les aseguro que verán el cielo abierto y los ángeles de Dios subiendo y bajando sobre el Hijo del Hombre.
Comentario
Los nombres de los arcángeles figuran en los libros santos. Miguel, es defensor del pueblo subyugado y capitán de las huestes celestes contra los enemigos de Dios. Gabriel, es intérprete de la historia humana y nuncio de los nacimientos que ponen a punto la salud de Dios. Rafael, es guía de los que viajan en busca de salud. Las figuras angélicas tienen amplio arraigo en el pueblo de Dios. Miguel, Gabriel y Rafael son servidores de Dios y servidores de cada creyente y, por lo mismo, la comunidad católica los venera como intercesores. Es frecuente escuchar de labios de un migrante, de un menesteroso o de un convaleciente que alguien fue un ángel para él. Se refieren personas que, de una manera inesperada los ayudaron en un momento crítico, les procuró seguridad, alimento o salud. Surgen ángeles a cada paso, y la ruta cotidiana nos da la oportunidad de volvernos ángeles para alguien en necesidad. Abramos los ojos y seamos servidores de los hijos de los hombres.
“Dios puede estar ofreciendo algo más, y en nuestra distracción cómoda no lo reconocemos” (GE 172).