Diario Bíblico en Español

24 de Noviembre del 2022

Primera lectura: Ap 18,1-2.21-23; 19,1-3.9a: 
¡Cayó la gran Babilonia!
Salmo: 100: 
Dichosos los invitados al banquete de bodas del Cordero
Evangelio: Lc 21,20-28: 
La destrucción de Jerusalén está cercana

34a Semana Ordinario Andrés Dunc-Lac y comp.(1839) 

20 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando vean a Jerusalén rodeada de ejércitos, sepan que está cercana su destrucción.
21 Entonces los que estén en Judea escapen a los montes; los que estén dentro de la ciudad salgan al campo; los que estén en el campo no vuelvan a la ciudad.
22 Porque es el día de la venganza, cuando se cumplirá todo lo que está escrito.
23 ¡Ay de las embarazadas y de las que tengan niños de pecho aquel día! Sobre el país vendrá una gran desgracia y sobre este pueblo soplará la ira de Dios.
24 Caerán a filo de espada y serán llevados prisioneros a todos los países. Jerusalén será pisoteada por paganos, hasta que la época de los paganos se termine.
25 Habrá señales en el sol, la luna y las estrellas. En la tierra se angustiarán los pueblos, desconcertados por el estruendo del mar y del oleaje.
26 Los hombres desfallecerán de miedo, aguardando lo que le va a suceder al mundo; porque hasta las fuerzas del universo se tambalearán.
27 Entonces verán al Hijo del Hombre que llega en una nube con gran poder y gloria.
28 Cuando comience a suceder todo eso, enderécense y levanten la cabeza, porque ha llegado el día de su liberación».
 
Comentario 

El libro del Apocalipsis encierra la capacidad de soñar un futuro mejor. Leer este libro es como estar delante el sermón de Martin Luther King “Yo tengo un sueño”, donde el pastor bautista vislumbró una sociedad sin opresión racista. Apocalipsis 8,2 expone otro sistema de muerte, usando la imagen de la ‘gran Babilonia’ para soñar con el fin del imperio romano opresor. Aunque éste estaba lejos de caer –caerá en el siglo V d.C.– el Apocalipsis sueña con optimismo el futuro, proclamando con fe un mundo sin la violencia ni la dominación romana. El grito «¡cayó la gran Babilonia!» es en la Escritura una metáfora que denuncia los proyectos anti-Dios y los condena al fracaso. Su valía la encontramos día a día en América Latina, donde nuestros pueblos marchan denunciando y proclamando el fin del capitalismo opresor, el patriarcado, la violencia racista, o el exterminio indígena, teniendo fe en un mundo diferente. Soñemos como el Apocalipsis y trabajemos para que podamos gritar nuevamente: ¡Por fin la gran Babilonia ha caído!